El proyecto de ley que autoriza el uso de las acciones de la Compañía Estadual de Aguas (Cedae), de Río de Janeiro, para viabilizar un préstamo de más de 3 billones de reales – alrededor de 1 billón de dólares – de la Unión, fue votado por la Asamblea Legislativa del Estado el último lunes (20 de febrero). El proyecto es considerado por los movimientos populares y trabajadores de la empresa como la "Privatización de la Cedae".
En entrevista con Brasil de Fato, el sindicalista y trabajador de la Cedae, Ary Girota, destaca las consecuencias de la privatización. Para él, esta iniciativa es la punta del iceberg de un proyecto de privatización mucho mayor.
‘‘Privatizar la CEDAE es apenas la punta del iceberg. Se ellos consiguen entregar la Cedae, – que hoy es una empresa lucrativa con dividendos del estado de Río de Janeiro – cualquier empresa estadual será más fácil de ser entregada. El gran problema de esto es la privatización de un bien que es el agua. Algo que no debe ser objeto de lucro económico", dijo.
Desde el año pasado, servidores públicos, movimientos populares y funcionarios de la Cedae realizaron diversas protestas contra la venta de la empresa y el llamado ´paquete de maldades ´del gobierno de Luiz Fernando Pezão. Y este año las manifestaciones se intensificaron. La represión policial también aumentó. En los últimos actos, el centro de Rio fue sitiado, prácticamente un escenario de guerra, con coches blindados contra la población, armas no letales y hasta el uso de armas de fuego por parte de algunos policías.
Dos enmiendas fueron incorporadas, este martes (21) al proyecto de venta de la Cedae. Con reflejos, el gobierno del Estado queda obligado a usar los préstamos de 3 billones de reales de la Unión, prioritariamente, para liquidar salarios y pensiones de funcionarios. La otra enmienda aprobada, garantiza el mantenimiento de la tarifa social reducida.
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*Traducción: Gerardo Gamarra
