Un accidente de trabajo que involucró a empleados de una empresa de internet provocó una descarga eléctrica que resultó en la muerte de nueve personas la noche del pasado sábado 9 en el campamento "Terra e Liberdade", dirigido por el Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), en Parauapebas, al sur del estado de Pará, en la región norte de Brasil.
Murieron seis personas sin tierra y tres trabajadores de la empresa. Ocho personas resultaron heridas con quemaduras y fueron trasladadas al hospital. El domingo 10, una de ellas seguía hospitalizada con quemaduras de segundo grado, según el MST.
La información se hizo pública el domingo 10 en una rueda de prensa organizada por dirigentes del Movimiento, que expresaron su solidaridad con las víctimas y reafirmaron la importancia de la lucha por la tierra en el sur de Pará, región marcada por las acciones violentas de los latifundistas, dueños de tierras que el movimiento reclama para la reforma agraria.
Según el MST, el accidente ocurrió cuando empleados de una empresa de internet "sin el estándar mínimo de seguridad" instalaron una antena de internet solicitada individualmente por los residentes del campamento, que alberga a unas 2.500 personas. Luego de la descarga eléctrica, se llamó al sistema de urgencias médicas SAMU y a los Bomberos. El fuego fue contenido y los sin tierra se movilizaron para rescatar a los heridos.
"Sobre las 20 h, cuando intentaban arreglar una antena, el equipo habría entrado en contacto con la red de alta tensión. Ese contacto incendió todos los cables de internet, que son de material inflamable, e incendió algunas chozas", explicó Pablo Neri, de la Dirección Nacional del MST.
El MST identificó a ocho de los nueve muertos: Jovenilson Aragão Trindade, Francisco Ferreira, Francisco De Assis Pereira Rodrigues, Fernanda Sousa de Almeida, Eva María da Conceição Silva, Francisco Nascimento de Sousa Júnior, Gabriel Pereira da Silva y Geovane Pereira dos Santos. Los tres últimos nombres son de los técnicos de internet, según una nota difundida por la empresa empleadora, G5 Internet.
"G5 Internet, de Parauapebas, ofreció servicios a los acampados, quienes aceptaron firmar un contrato con la empresa. Como el Movimiento Sin Tierra no puede brindar internet, la decisión fue que la empresa pueda brindarlo", dijo Pablo Neri.
La empresa lamentó las muertes
En el comunicado difundido por la red social Instagram, G5 Internet lamentó profundamente la muerte de los trabajadores, afirmó que sigue apoyando a las familias de las víctimas y deseó consolar y fortalecer a los involucrados.
"También extendemos nuestras condolencias a todos los que perdieron a sus familiares y amigos en el incendio ocurrido en el campamento del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra - MST, en Palmares II, la noche de este sábado 9", afirmó G5 Internet en su declaración.
Brasil de Fato se puso en contacto con G5 Internet y preguntó si los trabajadores trabajaban en condiciones de seguridad adecuadas, pero no obtuvo respuesta antes de la publicación del informe. En el caso de que respondan, se actualizará el texto.
Beatriz Luz, dirigente del MST en Pará, afirmó que los acampados pidieron a los empleados de G5 que retomaran el servicio al día siguiente, debido al horario tardío.
"Identificamos una empresa que también lleva a un proceso de precarización laboral, por lo que el servicio se extendió hasta esa hora de la noche, realizándose de manera poco preparada, con pocos dispositivos técnicos para proteger a los trabajadores", dijo Luz.
El campamento reclama la reforma agraria para una zona ilegal
Según el MST, el campamento "Terra e Liberdade" está a 5 kilómetros de las haciendas Santa Maria y Três Marias, que serían grandes propiedades improductivas en tierras apropiadas ilegalmente. Por ello, el Movimiento solicitó al Instituto Nacional de Colonización y Reforma Agraria (INCRA) realizar una inspección de las propiedades para determinar si son aptas para la reforma agraria.
"Los títulos están en posesión del acaparador de tierras de Marabá, Ítalo Toddy, y fueron canjeados por deudas en negociaciones dudosas con la familia Miranda –terratenientes conocidos por sus extensas propiedades públicas y por cometer crímenes contra la naturaleza y los/as trabajadores/as–", declaró el MST en un comunicado de noviembre de este año.
Según el Movimiento, los terratenientes de la región respondieron a la ocupación con un asedio a los sin tierra, que contó con el apoyo de las fuerzas policiales de Pará. Hombres armados han intimidado a los acampados, impidiendo que las personas entren y salgan de la zona.
Beatriz Luz no descarta que los terratenientes aprovechen el accidente para deslegitimar la lucha por la tierra en la región. "Pero lo que hemos visto es precisamente lo contrario, es el deseo de permanecer en el territorio hasta que la tierra esté asegurada", afirmó.
La municipalidad brindó solidaridad
Liderada por Darci José Lermen (MDB), la municipalidad de Parauapebas declaró el pasado domingo 10 que "no escatima esfuerzos en apoyo incondicional a las víctimas de este fatídico suceso y expresa solidaridad con los familiares y amigos de las víctimas".
El gobierno municipal también dijo que, desde los primeros momentos, equipos del Servicio Móvil de Atención de Emergencias (SAMU) y ambulancias de base acudieron al lugar para brindar asistencia.
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Además, informó que la Defensa Civil brinda apoyo en el lugar con equipos del sector social, para acoger y registrar a las familias, con el fin de entregarles kits humanitarios.
"También fue creado un Comité de Crisis en el Cementerio Jardim da Saudade para acelerar la necropsia y entierro de los cuerpos, junto con el IML y la Policía Civil. Agentes de la Dirección Municipal de Tránsito y Transporte (DMTT) organizan el flujo de tránsito en el lugar, y también se encuentran presentes agentes de la Guardia Municipal de Parauapebas", dice la nota de la municipalidad de Parauapebas.
Edición: José Eduardo Bernardes
