El martes (13), la Policía Técnico-Científica del estado de Rondônia – norte de Brasil – anunció que el resultado del examen de ADN confirma la muerte de Nilce de Souza Magalhães, quien era militante del Movimiento de Afectados por Represas y Diques [Movimiento dos Atingidos por Barragens, MAB, en portugués]. Familiares e integrantes del MAB preparan un homenaje y un acto en memoria de la pescadora afectada por la Usina Hidroeléctrica (UHE) Jirau.
Nicinha, como era conocida, desapareció el 7 de enero, en Porto Velho, capital del estado norteño de Rondonia, y su cuerpo fue encontrado cinco meses después, a cerca de 400 metros de su antigua casa, en el campamento de pescadores localizado en el Río Mutum.
En junio, las hijas de Nicinha reconocieron el reloj de pulsera, la parte inferior del bikini y una bermuda hallados junto al cadáver de la madre. Sin embargo, la liberación del cuerpo necesitaba de la confirmación del examen de ADN, que sería realizado por la Secretaría de Seguridad del estado de Mato Grosso, debido a la ausencia de este servicio en Rondonia.
Militancia
Nicinha era conocida en la región por la lucha en defensa de las poblaciones afectadas y por la denuncia de violaciones de derechos humanos cometidas por el consorcio de Energía Sustentable de Brasil (ESBR), responsable por la UHE Jirau. La militante realizó diversas denuncias a lo largo de estos años, participando de audiencias y manifestaciones públicas, en las cuales apuntó los graves impactos generados por la actividad pesquera en el Río Madeira.
Investigación criminal
El juicio a los acusados por la muerte de Nicinha – Edione Pessoa da Silva y Leonardo Batista da Silva – estaba marcado para comenzar el último miércoles (7), cuando la desaparición completaba exactamente 11 años.
Sin embargo, fue postergado después de la solicitación de la defensa. La Cámara Primera del Tribunal de la comarca de Porto Velho remarcó el proceso debido al anexo de un examen pericial apenas un día antes de comenzar el juicio.
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Traducción: María Julia Gimenez
