HUELGA

El quinto día del paro de camioneros en Brasil, Temer convoca a las Fuerzas Armadas

Camioneros bloquean las principales carreteras y exigen la eliminación de impuestos al combustible

Brasil de Fato | São Paulo y Brasília |
La huelga de camioneros en Brasil llega al quinto día y genera escasez de alimentos y de combustibles en todo el país
La huelga de camioneros en Brasil llega al quinto día y genera escasez de alimentos y de combustibles en todo el país - Tania Rêgo/Agencia Brasil

Tras cinco días de huelga de los camioneros en Brasil, con impactos en diversos frentes en los 26 estados y en el Distrito Federal del país, el presidente Michel Temer anunció, en un pronunciamiento oficial este viernes (25), que convocará a las fuerzas federales de seguridad - Ejército, Aviación, Marina y Policía Vial Federal - para dispersar el paro nacional de esta categoría.

Las razones de las protestas de los camioneros son las sistemáticas alzas en el precio de los combustibles en las gasolineras, principalmente el diésel, que en los últimos 12 meses, sufrió un incremento de 12% para el consumidor.

El movimiento de camioneros autónomos reivindica que se elimine la cuota de contribución a los fondos PIS [Programa de Integración Social] y COFINS [Contribución para el financiamiento de la Seguridad Social], fondos destinados al financiamiento del seguro por desempleo y políticas públicas sociales, entre otros, y que haya exención del impuesto que incide en el precio final del combustible, el CIDE. La categoría reivindica  tales cambios para la producción de diésel, el principal combustible utilizado en los fletes y demás transportes de mercaderías en el país.

En el quinto día de huelga hay cierto desabastecimiento de comida en supermercados y de gasolina en gasolineras de todo el país, generando largas colas y tumultos en los establecimientos comerciales y reducción del número de autobuses en circulación.

Este jueves por la noche (24), el gobierno brasileño se reunió con representantes de la categoría y firmó un acuerdo, pero los camioneros en paro en las carreteras afirmaron que no se ven representados en la decisión. Entre otras medidas, el gobierno propuso la reducción a cero de la cuota de Contribución de Intervención en el Dominio Económico (CIDE) sobre el diésel, la reducción de 10% en el precio del combustible en las refinerías y el congelamiento de precios por 30 días. Pero el gobierno no aceptó una de las principales reivindicaciones, la exención de las cuotas PIS y COFINS.

La Asociación Brasileña de Camioneros (ABCAM)  informó que los trabajadores seguirán movilizados en protesta contra la política de precios de los combustibles, cuyo precio tiene un 42% de impuestos. “Al contrario que otras entidades que dicen representar a los camioneros, la ABCAM no los traicionará. Seguiremos firmes con nuestro pedido inicial”, dijo la entidad en comunicado.

El decreto que autorizará la acción de las fuerzas federales de seguridad será publicado este viernes (25) por la tarde y según informaciones transmitidas previamente por algunos medios, autorizará multar y detener a camioneros que no retomen su trabajo, además de autorizar al ejército a prender y conducir camiones en caso de que los conductores rehúsen conducir.

En su pronunciamiento oficial, Temer afirmó que “el gobierno tuvo el coraje de dialogar y ahora tendrá el coraje de ejercer su autoridad”. El presidente golpista clasificó como “minoría radical” los camioneros que siguen en paro tras el acuerdo.

Huelga

El bloqueo de carreteras y la imposibilidad de entregar productos al mercado de bienes de consumo continúan generando crisis de desabastecimiento en diversas partes del país.

En la ciudad de São Paulo se decretó estado de emergencia este viernes (25). En la mayor ciudad de país, se había reducido la flota de autobuses en circulación a un 40% debido a la poca reserva de combustible.

La alcaldía de São Paulo solicitó una medida cautelar en la Justicia este jueves (24) para garantizar el abastecimiento de los autobuses y camiones de basura. Solicitó también la aplicación de una multa diaria por el valor de US$ 260 millones a los dos sindicatos estaduales que participan de la movilización, en caso de desabastecimiento.

La falta de combustible también impacta a los aeropuertos. En las ciudades de Recife y Brasilia el producto se agotó. Se cancelaron al menos menos nueve vuelos en el aeropuerto de Brasilia.

La huelga además repercute en otros frentes. En Rondonia, en la región Norte del país, 16 plantas termoeléctricas racionan energía y se cancelaron las clases en diversas instituciones de enseñanza del país.

Edición: Diego Sartorato y Cecilia Figueiredo | Traducción: Luiza Mançano