A cuatro días del juzgamiento del pedido de libertad hecho por la defensa del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, que ocurriría el martes (26), Edson Fachin, magistrado del Supremo Tribunal Federal (STF), determinó retirar el pedido de la agenda de los magistrados.
Fachin comprendió que, como el Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región (TRF4) rechazó enviar un recurso contra la condena de Lula al STF, el pedido de la defensa fue perjudicado.
En entrevista con Brasil de Fato, el abogado Ney Strokaze explica que este es un procedimiento común, ya que la gran mayoría de los recursos extraordinarios presentados al tribunal de segunda instancia no son considerados aptos para ir al STF por “no cumplir con los requisitos legales”.
“El TRF4 recibió apenas el recurso especial, que fue encaminado al Supremo Tribunal de Justicia (STJ), pero no recibió el recurso extraordinario [destinado al STF]. Como el TRF4 no recibió el recurso extraordinario, ese pedido de medida cautelar que sería juzgado el martes perdió el objeto”, dice Strozake.
“El hecho de no recibir ese recurso es muy común. Cerca de 90% de los recursos el TRF4 no los recibe”, complementa, reforzando que el juicio de admisibilidad de ambos recursos es de evaluación exclusiva del TRF4.
Según el abogado, el próximo paso para la defensa de Lula es presentar un recurso de apelación contra el auto, dirigido a Edson Fachin, que podrá tomar la decisión de aceptarlo solo o remitirlo a la sala del Supremo. “Lo que hubo fue un retraso de una posible decisión a ser tomada por la sala”, resalta.
El abogado comenta también que la decisión sobre la cautelar que ocurriría el próximo martes (26) no es común, mientras que la decisión sobre un recurso de apelación contra el auto presentado por la defensa no es nada excepcional, tanto en el STJ como en el STF.
“Si el [Fachin] remite este recurso de apelación contra el auto a la sala, podrá suceder lo que iba a acontecer el martes, que es que la sala se pronuncie, primeramente, si recibe el recurso extraordinario. En segundo lugar, ellos pueden pronunciarse sobre el recibimiento o no del efecto suspensivo que la defensa estaba pidiendo”, explica.
Incluso con la posibilidad de abrir la discusión a la sala, el ministro Edson Fachin podrá tomar las decisiones solo si así lo desea.
Strokaze señala que en julio habrá receso en el Supremo, lo que puede resultar en un aplazamiento aún mayor de la decisión sobre el recurso de la defensa del ex presidente, preso desde abril en el edificio de la Policía Federal de Curitiba, después de haber sido condenado en el proceso del Triplex de Guarujá.
En el pedido de prisión domiciliar, la defensa de Lula reiteró argumentos ya presentados al propio TRF4 que señalan irregularidades en el proceso y falta de imparcialidad del juez de primera instancia Sergio Moro y de los fiscales del Ministerio Público.
